JUVENTUD DE PRIMAVERA.
***** ¡Oh, juventud!, hermosa y pasajera. Efímero tesoro de la vida; fugas, como la flor de primavera, breve, como una lámpara encendida. **** Son tus años alegres y risueños, armoniosos en cada amanecer; sin angustias que turben nuestros sueños, y el júbilo nos pueda entorpecer. **** Son tus días de luz encantadora; el céfiro que arrulla los rosales; salud primaveral y bienhechora; un ángel protector contra los males. **** No hay angustias que nublen nuestra mente; ignoramos el paso de los años, que puedan malograr nuestro presente y llenarnos de crueles desengaños. **** Cuando lleguen las horas postrimeras, y la frente de surcos se ha llenado, escuchamos las quejas lastimeras de aquellos que añoramos el pasado. ****- Solo en sueños volvemos a las horas felices de la efímera existencia; ya se fueron, también, con las auroras que llenaron de luz nuestra presencia. **** Ya no quiero mirarme en el espejo, me atormenta la ingrata senectud; mas no puedo ignorar que ya estoy viejo;